sábado, 10 de enero de 2015

Libélulas en las charcas de Los Camorchos

Las Charcas de Los Camorchos, entre Torrelodones y Hoyo de Manzanares (Madrid), son conocidas por su importancia para los anfibios, con casi una decena de especies distintas.

Ubicación de las charcas, a la izquierda de la carretera. La presencia de agua puede variar mucho entre años.


Las más habituales son el gallipato (Pleurodeles waltl), el tritón pigmeo (Triturus pygmaeus), la rana común (Pelophylax perezi), los sapos de espuelas, corredor y común (Pelobates cultripes, Epidalea calamita y Bufo bufo, respect.) y el partero ibérico (Alytes cisternassi). Al estar muy cercanas a la carretera, el tráfico atropellaba cada año cientos de sapos, hasta que se instalaron unas barreras que los interceptan y los dirigen hacia unos pasos subterráneos.

Tritón pigmeo, Triturus pygmaeus. Antiguamente se consideraba una subespecie de T. marmoratus. Es el tritón más frecuente en Los Camorchos.


Gallipato, Pleurodeles waltl. 


El origen más probable de estas charcas es la explotación minera. Así, se localizan en este paraje restos de la extracción pasada de wolframita y casiterita [citado en L. Jordá Bordehore, O. Puche Riart y L. F. Mazadiego Martínez (eds.) 2005. La minería de los metales y la metalurgia en Madrid (1417-1983). Publicaciones del Instituto Geológico y Minero de España. Serie Recursos Minerales nº 7. Madrid].

Las charcas están incluidas en el catálogo de Embalses y Humedales de la Comunidad de Madrid (teóricamente deberían disponer de un plan de gestión, por ahora inexistente) y en el Inventario Español de Zonas Húmedas (un catálogo de humedales sin implicaciones legales). Asimismo, toda la zona se encuentra dentro del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares y de la Red Natura 2000, en concreto en el LIC ES3110004 “Cuenca del Río Manzanares”.

Recientemente, la Comunidad de Madrid ha vallado parcialmente el perímetro de las charcas –aunque el acceso el libre- y ha instalado señalización interpretativa. También se han eliminado peces y tortugas exóticas que habían sido introducidas ilegalmente.

Todos los años muestreo los anfibios en estas charcas (censos visuales, no invasivos) para el programa SARE de la Asociación Herpetológica Española (AHE). Con este seguimiento se pueden conocer las tendencias de las poblaciones de anfibios a escala nacional, información muy importante para adecuar su estado de protección y poder aplicar medidas de conservación. Los censos nocturnos de anfibios son una gran experiencia, sobre todo cuando se forman coros de numerosos ejemplares de ranas. 

Pero aparte de los anfibios, me gustaría reivindicar el interés de estas charcas por sus odonatos (libélulas y caballitos del diablo). Sospechaba que la comunidad de odonatos podía ser interesante, de manera que durante la primavera y el verano de 2014 realicé visitas diurnas a la charca principal de Los Camorchos para verificarlo. El resultado es el que muestro en la tabla, con 14 especies presentes confirmadas. Otras dos especies resultan dudosas, así que no las incluyo.

Especies presentes
Meses
Anisoptera (Libélulas)
F. Aeshnidae

          Anax imperator
mayo, junio, julio
F. Libellulidae

          Libellula quadrimaculata
mayo
          Orthetrum cancellatum
mayo, junio, agosto
          Sympetrum fonscolombii
agosto
          Sympetrum striolatum
junio, julio, agosto
Zygoptera (Caballitos del diablo)
F. Coenagrionidae

          Coenagrion scitulum
junio
          Enallagma cyathigerum
mayo
          Erythomma lindenii
mayo, junio, julio, agosto
          Ischnura graellsii
mayo, junio, julio, agosto
F. Lestidae

          Lestes barbarus
julio
          Lestes dryas
mayo, junio, julio
          Lestes virens
julio, agosto
          Lestes viridis
mayo, agosto
          Sympecma fusca
mayo

Anax imperator. La mayor de nuestras libélulas. Presente de mayo a junio en Los Camorchos.

Libellula quadrimaculata. De gran tamaño, compite con Anax imperator por el dominio de las lagunas, con persecuciones constantes.

Orthetrum cancellatum, presente entre mayo y agosto en pequeñas cantidades.

Sympetrum fonscolombii. Abundante durante el mes de agosto, pudiendo encontrarse bastante alejada del agua.

Sympetrum striolatum. La libélula de tamaño grande más abundante en Los Camorchos, con presencia continua entre mayo y agosto.

Coenagrion scitulum. Este raro caballito del diablo parece ser una especie escasa en España, aunque presente en Los Camorchos en buena densidad en el mes de junio.

Enallagma cyathigerum. Especie de amplia distribución que solo fue detectada en el mes de mayo en Los Camorchos. En la foto aparece con una presa que acababa de cazar.

Erythromma lindenii. El caballito del diablo más abundante en Los Camorchos, con presencia continua entre mayo y agosto. Los machos forman amplios grupos en vuelo sobre las lagunas o se exhiben posados en la vegetación emergente.

Ischnura graellsii. Diminuto caballito muy abundante en las zonas más recogidas de la laguna, siempre entre la vegetación. Presente entre mayo y agosto.

Lestes barbarus. Poco frecuente (a pesar de estar presente en arroyos y ríos cercanos), solo ha sido detectado un par de veces en el mes de julio.

Lestes dryas. El léstido más frecuente en Los Camorchos, entre mayo y julio.

Lestes virens. Este pequeño caballito del diablo es frecuente en verano, donde sustituye a L. dryas como el léstido más abundante.

Lestes viridis. Detectado en mayo y en agosto, pasando desapercibido durante los meses intermedios. La existencia cercana de árboles permite la presencia de esta peculiar especie (la única en España que pone sus huevos en la madera en vez de en el agua). 

Sympecma fusca. Solo detectado en el mes de mayo. Esta especie completa la amplia representación de léstidos en la laguna mayor de Los Camorchos. 


¿Y qué significa la presencia de estas 14 especies? teniendo en cuenta que en España (excluyendo Canarias) hay 77 especies de Odonatos, resulta sorprendente que una sola charca de reducidas dimensiones pueda albergar casi un 20% de la diversidad peninsular de este grupo de insectos. Y siempre es posible que se me haya escapado alguna especie escasa, ya que la determinación se ha realizado a través de fotografías.


En definitiva, parece que las charcas de los Camorchos no sólo son importantes para anfibios, sino también para libélulas y caballitos del diablo. Es otro buen argumento para su conservación y la de su entorno. Y seguro que hay más grupos (por ejemplo, flora, escarabajos acuáticos…) para los que las charcas también resultan interesantes. Es sólo cuestión de echar un vistazo...

Invierno 2015
Ricardo

sábado, 3 de enero de 2015

Alzacolas y chumberas

Durante el año pasado no tuve tiempo de dedicar una entrada del blog al pajarillo estival que más me ha costado encontrar últimamente: el alzacola (Cercothichas galactotes). Lo había estado buscando en la provincia de Almería, en algunos de los sitios donde, en teoría, era una especie numerosa en el pasado. Sin embargo, sus poblaciones han disminuido mucho y ahora es muy difícil encontrarlo en esta provincia. Pero en su rango occidental de distribución en España (Extremadura, provincia de Sevilla, etc.) parece haber ocurrido lo contrario, de manera que es posible que la especie se encuentre en expansión en este ámbito geográfico. De todas formas, aunque se ha encontrado en nuevas localidades, no existen estudios concluyentes que comparen distribuciones pasadas y presentes por ahora.

Los alzacolas que muestro en estas fotos corresponden a una nutrida población que se ubica en el oeste de la provincia de Sevilla, en plena campiña.


Foto 1. El alzacola es una especie migradora transahariana, presente en todo el sur del paleártico occidental, incluyendo el norte de África y el Sahel. En España selecciona ambientes semiáridos y cultivos secos, con preferencia por olivares, viñedos, almendrales y algarrobales, además de setos de chumberas.



Foto 2. Con la cola elevada, en la actitud que le ha dado nombre. La cola es muy rojiza, con los extremos de las rectrices blancos y las puntas oscuras, lo que destaca mucho. Se supone que el movimiento de esta "bandera" caudal sirve para la comunicación  intraespecífica, en especial entre los miembros de la pareja y entre machos rivales.


El hábitat en esta zona es típicamente agrícola y destaca la presencia de chumberas, que el alzacola utiliza tanto para ocultarse de los depredadores como para dejarse ver, subiéndose a lo más alto para cantar. Además, no es raro encontrar nidos de alzacola entre las espinas de las chumberas.


Foto 3. Macho cantando desde lo alto de una chumbera, normalmente la mayor atalaya disponible en zonas desarboladas.



Foto 4. Hábitat agrícola del alzacola en plena campiña sevillana.



Foto 5. Nido antiguo y desocupado de alzacolas, ubicado en el interior de una chumbera. Agradezco al paisano que me lo mostró.


Hay varias especies de chumberas en España, la más extendida de las cuales es Opuntia ficus-indica. Fueron introducidas desde América tropical hace siglos, tanto por su fruto como por servir de alimento a las cochinillas (productoras de tinte) y, especialmente, por formar setos –auténticas murallas de espinas- usadas en algunas zonas costeras como defensa frente a las incursiones de la piratería. Hoy las chumberas se encuentran incluidas en el Catálogo Español de Especies Exóticas Invasoras (Real Decreto 630/2013), de manera que deberán ser erradicadas, a pesar del posible impacto que ello pueda tener sobre el alzacola.


Feliz 2015.
Ricardo