sábado, 18 de junio de 2011

El pechiazul en la Sierra de Guadarrama


Macho de pechiazul (Luscinia svecica) en lo alto de un piorno. En celo son fácilmente detectables, ya que cantan con frecuencia, a veces incluso en vuelo.

Ya me hubiera gustado que las fotos que acompañan esta entrada hubieran sido hechas en la Sierra de Guadarrama. Las hice en Gredos esta primavera, en la zona más típica de pechiazules como es los piornales que hay en la subida al circo de Gredos desde la plataforma. Lo he buscado en los últimos años en diferentes piornales de la Sierra de Guadarrama, pero nunca he dado con él. El otoño pasado vimos uno en Malagón-Abantos, pero muy probablemente estaba en paso, ya que en primavera no lo había localizado en esa zona en varias visitas.

En el pasado parece que era más común en la sierra de Guadarrama, sobre todo en la cara norte. No estoy diciendo que haya desaparecido, pero si que se ha hecho mucho más escaso que antes. Por tanto, algo ha pasado para que una especie, que podría estar en expansión en España (nuevas poblaciones en zonas como Galicia), se rarifique en la Sierra de Guadarrama.

Los individuos que vi en esta zona de Gredos no presentaban medalla (manchita blanca o roja dentro del azul del pecho). Parece que la medalla es un carácter muy variable, como corresponde a poblaciones de alta montaña aisladas.

Esta vez parece que el calentamiento climático no debe ser la causa, al menos, directa, porque se supone que la población de Gredos se mantiene estable. La impresión que me queda tras visitar zonas de alta montaña en Gredos y Guadarrama recientemente es que, en ésta última, los piornales -más escasos que en Gredos- están además peor conservados. Tal vez la diferencia se deba a la carga ganadera. En algunas zonas, como La Morcuera, parece que ha aumentado (se podría comprobar con los datos del censo ganadero) y desde luego muchos piornales lo han notado, por la presión del propio ganado o porque directamente se han eliminado para abrir pastos. Pero resulta una paradoja que allí donde el ganado desaparece y se produce una “matorralización”, el hábitat deja de ser adecuado para el pechiazul, que precisa claros de herbáceas entre los piornos. Así que cierta densidad de ganado es necesaria.

Guadarrama, además, tiene bastante más presión por turismo que Gredos. No se si el “efecto reclamo” del futuro Parque Nacional le vendrá demasiado bien. En cualquier caso, los gestores del espacio seguro que lo tendrán en cuenta, para no tener seis millones de madrileños campando a sus anchas por un Parque Nacional.

El macho de la foto pertenecería a la subespecie L. s. cyanecula , y  por la falta de medalla, a la variedad wolfi. 

Hay bastantes incógnitas sobre lo que está pasando con las aves de alta montaña, en el sistema central y, por extensión, en toda España. Como siempre, faltan datos del pasado para compararlo con los del presente. Así que urge dedicar atención preferente a estas comunidades en los próximos años. Ahora mismo, junto con las comunidades de aves de medios agrarios, es el mejor bioindicador que se me ocurre (relativo a aves) para ver lo que está pasando con la biodiversidad en España.

Roquero rojo (Monticola saxatilis) de la Sierra de Guadarrama.

Acentor alpino (Prunella collaris) de la Sierra de Gredos. 

Buen verano
Ricardo